Dios cerró el camino al árbol de la vida y maldijo la tierra debido a la desobediencia de Adán. Él le dijo a Adán: “Maldita será la tierra por tu causa“. Este pasaje de la Escritura se puede traducir igualmente: “Maldita será la tierra por tu bien”.¿Cómo es posible que al maldecir el suelo, la situación de Adán y Eva pudiera mejorar? Ya estaban desnudos y muriendo, temerosos y avergonzados. La respuesta es que Dios tuvo la intención de usar los efectos de la maldición en la humanidad para lidiar con la causa de su desconexión con Él y la pérdida de su predestinación como hijos de Dios.
Vivir según la otra ley fue la razón por la cual Adán y Eva fueron desconectados de la imagen y semejanza de Dios. Al maldecir la tierra, la cual era el contexto de la obra de Adán, Dios estaba frustrando directamente los intentos de Adán de gobernar la creación desde la base de su propia imagen y proyección de sí mismo. En otras palabras, los efectos de la maldición, incluido el cansancio asociado con la ausencia de frutos de su trabajo, y los espínos y los cardos que produciría el suelo, harían que Adán se apartara de buscar su propio bien y buscara la restauración con el Señor.
La “tierra” de un hijo de Dios se refiere al contexto específico para la vida y las obras de su predestinación. Cuando un hijo de Dios se esfuerza por vivir según el principio de la otra ley, en lugar de obedecer a la palabra de Dios como miembro del cuerpo de Cristo, experimentará los efectos de la maldición. Este es el juicio de Dios sobre ellos debido a la otra ley que está trabajando en ellos. La otra ley los pone en conflicto con la ley de Dios cuando es energizada por la ley del pecado. En lugar de ministrar la vida, la ley de Dios los juzga con debilidad y muerte.
Estudio: Génesis 3
Referencias
Gen 5:29 Y le puso por nombre Noé, diciendo: “Este nos dará descanso de nuestra labor y del trabajo de nuestras manos, por causa de la tierra que el SEÑOR ha maldecido.”
Gen 50:20 “Ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios lo cambió en bien para que sucediera como vemos hoy, y se preservara la vida de mucha gente.
Sal 119:71 Bueno es para mí ser afligido, Para que aprenda Tus estatutos.
Rom 8:28 Y sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien, esto es, para los que son llamados conforme a Su propósito.
Rom 5:8 Pero Dios demuestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.