En el pasado, a menudo nos hemos referido a cinco gracias de dones de ascensión ministeriales. Esta enseñanza se basó en la declaración de Pablo de que Cristo ha dado “algunos para ser apóstoles, algunos profetas, algunos evangelistas, y algunos pastores y maestros”. A veces se reforzaba la noción de cinco gracias ministeriales al comparar las gracias ministeriales con los cinco dedos en la mano de Cristo. Usando esta ilustración, el ministerio apóstolico fue comparado a menudo con el dedo pulgar, para ilustrar que la gracia apostólica toca cada una de las otras gracias ministeriales. Este tipo de ilustraciones han tenido algún mérito pero, en tiempos más recientes, hemos tomado conciencia de algunos puntos importantes que requieren revisión y aclaración.
El primer punto de aclaración es que las gracias de los dones de ascensión ministeriales no son la mano derecha de Cristo; sino que están en la mano derecha de Cristo. Esto significa que las gracias ministeriales no están cogiendo las siete estrellas sino que son una parte integral de las siete estrellas. Este punto de aclaración es significativo porque indica que aquellos con gracia ministerial necesitan funcionar en y a través del presbiterio de una iglesia candelabro.Una persona con un don de gracia ministerial de Cristo no tiene libertad para funcionar independientemente, con su propio ministerio itinerante. Para que su gracia sea eficaz para equipar a los santos para la obra de ministerio en el cuerpo de Cristo, necesitan estar sometidos a la comunión de la ofrenda que se encuentra en un presbiterio.
El segundo punto de aclaración es que no hay cinco gracias ministeriales. Existen solamente cuatro gracias ministeriales. Esto es consistente con el resto de las Escrituras que revelan las cuatro dimensiones de la gracia que pertenecen a Jesucristo. Esta conclusión es apoyada por el lenguaje que Pablo usó para nominar las gracias ministeriales en su carta a los Efesios, cuando combinó “pastores y maestros”. Nuestra conjetura es que Pablo no tenía la intención de que éstos fueran leídos como gracias ministeriales separadas sino que se estaba refiriendo a un pastoreo de enseñanza o a una enseñanza pastoral.
Estudio: Romanos 12
Referencias
Efe 4:11-12, 29 Y El dio a algunos el ser apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, a otros pastores y maestros, (12) a fin de capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo; (29) No salga de la boca de ustedes ninguna palabra mala (corrompida), sino sólo la que sea buena para edificación, según la necesidad del momento, para que imparta gracia a los que escuchan.
Apo 1:16-18 Y tenía en su diestra siete estrellas: y de su boca salía una espada aguda de dos filos. Y su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza. (17) Y icuando yo le vi, caí como muerto á sus pies. Y él puso su diestra sobre mí, diciéndome: No temas: yo soy el primero y el último; (18) Y el que vivo, y he sido muerto; y he aquí que vivo por siglos de siglos, Amén. Y tengo las llaves del infierno y de la muerte.
Hch 13:1 En la iglesia que estaba en Antioquía había profetas y maestros: Bernabé, Simón llamado Niger, Lucio de Cirene, Manaén, que se había criado con Herodes (Antipas, hijo de Herodes el Grande) el tetrarca, y Saulo.
Jud 1:12-13 Estos son escollos ocultos (manchas ocultas) en los ágapes de ustedes (fiestas espirituales de amor), cuando banquetean con ustedes sin temor, apacentándose (cuidándose) a sí mismos. Son nubes sin agua llevadas por los vientos, árboles de otoño sin fruto, dos veces muertos y desarraigados. (13) Son olas furiosas del mar, que arrojan como espuma su propia vergüenza (sus actos vergonzosos); estrellas errantes para quienes la oscuridad de las tinieblas ha sido reservada para siempre.